En el caso de las viviendas unifamiliares, el solicitante deberá ser una persona mayor de 75 años, una persona con discapacidad y/o una persona en situación de dependencia, que resida en una vivienda unifamiliar ubicada en cualquier lugar de la comunidad foral de navarra, siendo este su domicilio habitual y permanente.
En el caso de los edificios de comunidades, el solicitante deberá ser la comunidad de propietarios en régimen de propiedad horizontal de edificios plurifamiliares en la que resida, como mínimo, una persona con movilidad reducida. En estos casos, el 50% de las viviendas deben constituir el domicilio habitual o permanente para sus propietarios o arrendatarios en el momento de solicitarla.
Se considerará persona de movilidad reducida a personas mayores de 75 años, personas con un grado de discapacidad de al menos un 33% o personas en situación de dependencia reconocida. Es necesario en todos los casos que la persona que dé derecho a la solicitud (por lo menos una) haya residido de forma continuada en navarra durante al menos los dos años anteriores a la fecha de solicitud.