Como la idea de una casa relajante va asociada normalmente a los detalles minimalistas y acogedores, puedes recurrir perfectamente a la madera y a otros materiales naturales como el mimbre o el ratán para conseguir un ambiente más cálido en tu hogar.
Para ello, puedes comprar alfombras de yute o tejidas o alguna que otra cesta de mimbre, o incluso alguna mecedora o sillón de ratán para dar a algún espacio de la casa un aire ligero, cómodo y muy natural.
Y ya que estamos hablando de pequeños accesorios o elementos de decoración, no te olvides de recurrir a los cojines para los sofás o las butacas de casa, si quieres aumentar el confort.
Los cojines siempre dan sensación de calidez y de ambiente acogedor, incluso aunque estemos en épocas más calurosas como la primavera o el verano. Si los compras en colores lisos y suaves y evitas los colores chillones y los estampados demasiado estridentes, conseguirás mayor tranquilidad a la hora de desconectar y relajar tu mente en casa.