x
Visto en:
Márcio De Campos - Arquitectura E Design De Interiores
En realidad no sé en qué momento empezamos a cambiar. Tú y yo. De repente, aquellos pósters sobraban, los muebles de segunda mano se fueron de viaje, y tuve ganas de invertir en ti. En aquel tiempo, cambiamos algunas de tus ventanas por otras con rotura de puente térmico, añadimos toldos, invertimos en calefacción y hasta en aire acondicionado. Tus paredes se cubrieron de color y algún friso de madera en las zonas con más trote. ¡Ya empezabas a ser un hogar de verdad! nadie se acordaba ya de aquel pisito de estudiantes.