x
En cuanto entres a la exposición, te van a mostrar varios simulacros de casas completas de un tamaño más que mini. ¡Y se ven tan perfectas! pero la vida real no es así, porque nuestra ropa no es toda blanca ni toda igual, ni nos vamos a pasar las horas colocando perfectamente las tazas en la cocina. Las partes nobles de nuestras sartenes sólo estuvieron impolutamente limpias el día que las estrenamos... ¿quién tiene sólo libros de portada blanca? inspírate, pero no te obsesiones con la perfección de lo que ves.