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Sin embargo, en este punto aparece un problema: la aseguradora no te dará ese documento hasta que no hayas firmado el nuevo seguro, mientras el banco no anulará el antiguo sin ese mismo papel. ¿La solución? suscribir esa nueva póliza y solicitar a la aseguradora que la misma entre en vigor cuando caduque el seguro que tienes actualmente o bien, otra opción es firmarlo y tener claro que durante unas semanas deberás estar pagando dos seguros al mismo tiempo.