Las obras más habituales durante los meses de más calor pasan sobre todo por estas dos estancias por argumentos de sobra conocidos. Y es que en estos lugares es primordial actuar antes de que aparezcan las temidas humedades. Por ello, no hay que perder tiempo cuando se detecten manchas, malos olores o una plaga de insectos que alerten de una posible humedad.
Además, mejorando todo lo relacionado con las humedades (atajando el problema para erradicarlo y que no aparezcan más o se conviertan en algo crónico), se incide también en la mejora de la eficiencia energética de la vivienda.
Y ya que estamos, otro punto importante en las reformas en los meses de verano tiene que ver con la renovación del aire. Profesionales como los de murprotec cuentan con sistemas automatizados, como su CTA (central de tratamiento de aire), que mantienen el aire que respiramos en casa en condiciones saludables.