Todo apuntaba a una dirección, favorecer la colocación de paneles solares en viviendas y empresas. Por este motivo, las trabajas legales han ido desapareciendo poco a poco. La tecnología es cada vez más óptima y el coste de instalación ya no supone una gran barrera para el cliente.
Pensemos, además, que nuestro país goza con una energía solar de lo más destacable. Pocos son los lugares de la península y de los territorios insulares a los que no llega sol de una forma diaria. Si a esto le sumamos las subvenciones, todo parece más sencillo.
Para poder optar a ellas, necesitamos una serie de requisitos que no serán complicados, como poseer un proyecto firme. Cualquier empresa que se encargue de colocar paneles solares podrá solicitar estas ayudas por ti, olvidándote del papeleo y tramitándolo todo según la legislación de cada comunidad autónoma.
En cuanto al porcentaje de la subvención, variará dependiendo de las características de la instalación y de cada comunidad autónoma. No obstante, podemos hablar de casos de hasta un 55% de subvención para el precio final. Además, también se han instaurado varias bonificaciones del IBI y del icio en cada municipio.