¿Te aburren los espacios blancos? aquí tienes un ejemplo de cómo innovar con el color sin arrepentirte. Un suave azul combinado con una consola ligera de madera y algunos elementos muy clásicos. Su suelo, predominantemente blanco y la carpintería a juego, contribuyen a que el ambiente se vea relajado y muy fresco. ¿Y toda esa luz que se refleja en las paredes y el suelo? procede de las puertas con vidrieras. Otra genialidad que se agradece mucho en los recibidores, por ser espacios frecuentemente oscuros. Anota también la idea de usar detalles en color rojo, para crear contraste: la lámpara clásica, la alfombra del suelo y el cuadro en la pared. Son los que ponen la nota de dinamismo en un ambiente que, de no ser por ellos, se vería algo plano.