Otra solución para poder colocar la televisión en una habitación o estancia en la cual no hay conexión o toma de antena, es recurrir una antena portátil. Para ello, lo fundamental será cerciorarte bien de que en esa habitación y en la propia casa hay una buena recepción de la señal.
Pero si te decides por esto, tendrás que tener claras dos cuestiones. Si no te importa ver el mismo canal que el canal de la televisión principal, solo has de conectar la antena directamente al remitente de vídeo.
El problema surge cuando quieres ver otro canal. Para eso, tendrás que conectar un sintonizador al transmisor y, posiblemente, aunque no se vea del todo bien, es una opción que no te costará mucho dinero y que a la larga será práctica
Otra opción que tener en cuenta es recurrir a los denominados vídeo senders inalámbricos o remitentes de vídeo. Son unos aparatos que contienen un transmisor y un receptor que mandan la señal de forma inalámbrica de una estancia a otra.
Estos dispositivos pueden funcionar en la frecuencia de 2.4Ghz o 5Ghz., pero es mejor utilizar un modelo que funcione a la frecuencia de 5 ghz, para que no haya interferencias con otros dispositivos. Los hay de dos tipos: SD y HD.
Los transmisores con resolución SD se conectan a equipos que tienen conexiones de video analógico. Los HD están conectados por hdmi y se utilizan para televisiones de alta definición.
Si lo que quieres es enviar, por ejemplo, una señal de televisión a otra habitación de la casa, necesitas tener un decodificador externo. Para ello, has de conectar el cable de la antena al receptor y éste lo conectas después al transmisor, a través de un cable RCA, scart o hdmi, según sea el modelo. Luego conectas el receptor a la televisión donde quieres recibir esa señal.