x
Es indiscutible, el sofá es el rey de todos los salones. Esos días que estamos hartos del trabajo no tenemos otro pensamiento más que llegar a casa, y tirarnos en plancha al sofá. Pero no me digáis que no corta muchísimo el rollo si se ve feo, desaliñado o sucio. Si el tema de estar estirando o recolocando continuamente una funda no va contigo, sólo queda hacer dos cosas: la primera, tener más cuidado con los líquidos y las manchas que al pobre le van quedando. Y la otra, hacerle un mantenimiento regular. Aunque no lo veas sucio, el sofá es un nido de ácaros, polvo y otras sustancias por identificar.
¿Cómo se limpia bien un sofá?
- Lo más fácil retirando la funda si es desenfundable y haciendo justo lo que diga la etiqueta. Algunos tendrán suerte y lo podrán meter en la lavadora directamente, otros tendrán que llevar la funda a la tintorería.
- Si la funda no se puede retirar, comienza por pasar por todo el sofá la aspiradora en su función más suave (lo ideal sería que cada mes o mes y medio lo hicieras). Es momento de detectar posibles manchas. De haberlas y ser recientes, con un trapo húmedo es posible que salgan. Sino, puedes usar limpiadoras a vapor (probando primero en las zonas menos visibles del sofá, por si acaso la tapicería no aguantara las altas temperaturas).
- De todas formas, el mejor consejo si cae una mancha, es limpiarla de inmediato, ¡No la dejes secar! y en los casos más extremos contratar un servicio de limpiezas de tapicería a domicilio, que lo deje como nuevo.