Entre los suelos continuos, aquellos que no dejan ranuras, destaca el microcemento. Aunque ya te hemos contado casi todo lo que necesitas saber, está muy, pero que muy de moda. Es cierto que, al principio, este material se asociaba con estilos más minimalistas. No obstante, las opciones estéticas han avanzado considerablemente. Su acabado puede quedar genial en cualquier tipo de ambiente. Además, hay que decir que cuenta con una amplia variedad de colores y acabados, algo que aumenta sus posibilidades decorativas.
La estética neorústica queda preciosa con este tipo de pavimento, pero también aquellos ambientes con un toque industrial. Lo mejor de todo es que es un material impermeable, por lo que puedes colocarlo en cocinas y baños. Además, su colocación es relativamente sencilla (siempre por un profesional) y su mantenimiento muy fácil.