Frente a los suelos laminados, la tarima flotante ha ido perdiendo presencia en los hogares. Sin embargo, en reformas de alta gama y para propietarios que no quieran renunciar a disfrutar de la belleza de la madera natural, es una excelente elección. Pero, ¡ojo! no todas las tarimas son de la misma calidad. Las que tiene una capa superior de madera de mayor grosor son las mejores: son más estables, más resistentes y permiten acuchillarlas varias veces para recuperar su esplendor. Son más costosas, pero duran muchos más años en buenas condiciones. Si estás pensando instalar tarima flotante de madera en tu casa, estas ventajas te terminarán de convencer:
- Está confeccionada con madera natural, por lo que cada pieza es única y diferente.
- La madera aporta una textura, una calidez y un encanto que ningún suelo laminado puede igualar.
- Se puede acuchillar entre 2 y 3 veces a lo largo de su vida, dependiendo del grosor de la capa superior. Una vez barnizada, parecerá nueva.
- Algunas tarimas son más económicas que muchos laminados de alta gama.
La tarima flotante está indicada para viviendas donde el suelo no sufra mucho desgaste ni se tenga que limpiar a menudo. Por ejemplo, si tienes mascotas o vives cerca de la playa, no es la opción más aconsejable.
Por lo tanto, si lo que te preguntabas es si es mejor el suelo laminado o la tarima flotante, la respuesta es: ninguno de los dos. Solo tienes que valorar sus pros y sus contras, y elegir el suelo que mejor se adapte a tu casa. Acertarás, ¡seguro!