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Si tuvieras la suerte de tener una habitación libre en casa o estás en vía de conseguirlo, quédate con esta solución para crear un estupendo vestidor. La idea es sencilla: completamos toda la parte superior con módulos para las cosas que menos usamos y que no queremos que se vean (ni cojan polvo). En la central, instalamos unas barras para toda la ropa que necesitamos tener a la vista y colgada. Muchos cajones para guardar ropa interior, complementos y cositas más pequeñas... Y unas cestas deslizantes bajo la ventana, donde clasificar el calzado. ¿Qué os parece? ¿Tendremos sitio para todos los trapitos?