Para empezar, debemos fijarnos en si nuestro seguro es multirriesgo o a todo riesgo accidental. sí, principalmente encontramos estos dos tipos de seguros del hogar. Los primeros enumeran todos los riesgos que cubren (incendios, robos etc.) y nos dan información sobre sus limitaciones y exclusiones, eso sí, no tienen franquicia.
Por otro lado, los segundos nos cubrirán todos los daños originados por un accidente. Tienen algunas limitaciones, pero suelen ser menores que las de los seguros multirriesgo. No obstante, en este tipo de seguros sí hay que pagar una franquicia, aunque su cobertura es más amplia.
En españa no se suele comercializar el segundo y normalmente vemos los seguros multirriesgo. No obstante, en muchas compañías es posible contratar la opción de garantía todo riesgo accidental. De esta forma, para los siniestros corrientes no se aplicaría franquicia.