Un mueble a medida es una inversión que no es barata, esa es la realidad. Pero también es cierto que es la única manera de exprimir hasta el último milímetro. El dormitorio que veis en la fotografía es muy estrecho y de poco fondo, por eso inventaron una solución que rodea toda la cama. En un lateral dispusieron un ropero doble con puertas abatibles. Y en la parte superior, todo un sistema de módulos suspendidos con luz integrada. Estas composiciones son pesadas a la vista, por eso es fundamental acertar al elegir acabados y materiales. Aquí, la madera laminada semibrillante y el color blanco han sido claves para crear un espacio luminoso en el que cabe todo, todo y todo.
¿Has cogido alguna idea para poner fin al desorden en tu dormitorio? ¿Qué proyecto tienes en mente? cuenta, cuenta...