x
Visto en: Leib Motiv
Cuando el baño se comparte con la pareja o los hijos, conviene ser práctico. Y por eso, a veces -y si el espacio lo permite- es bueno apostar por lavabos dobles, así nadie discutirá por las mañanas. Cuando queremos aprovechar al máximo el espacio, también podemos optar por encastrar los lavabos en la propia encimera, algo que queda superestético. Una balda en paralelo a la encimera te permitirá almacenar todo aquello que necesitas en el baño y tenerlo siempre a mano.