Los suelos laminados han evolucionado muchísimo desde que salieron al mercado. Antes eran menos resistentes. Ahora es posible utilizar este pavimento en toda la casa. Sí, también en el baño. Estéticamente son suelos que nos gustan, pues pueden imitar materiales como la madera con bastante realismo. Ahora bien, no todos los suelos laminados son aptos para esta estancia. Debemos fijarnos en algunos aspectos clave.
Un suelo laminado para baño debe estar hecho con fibras hidrófugas. Además, también debemos fijarnos en que las lamas sean superficies antideslizantes.
Los suelos laminados específicos para zonas húmedas para baño suelen estar tratados para ser antibacterianos. Asimismo, el sistema de anclaje tendrá que estar específicamente hecho para evitar el paso del agua y no exclusivamente para facilitar el montaje. Si queremos tener menos problemas e ir a lo seguro, escojamos formatos grandes. Cuantas menos juntas, mejor.