¿No quieres sudar abriendo y cerrando el toldo? apuesta por automatismos para facilitar su apertura especialmente cuando sea muy grande. Motores, sensores de lluvia y viento, mando a distancia... ¡Sólo tienes que pedirlo! ya existen aplicaciones para el móvil y sistemas de domótica que pueden colaborar programando cuando quieres abrir o cerrar tus toldos. Alarga su vida recogiéndolo antes de que llueva o haga mucho viento, o si ya se ha mojado deja que se seque del todo antes de recogerlo. Recuerda que si la tela se deteriora y la estructura está bien, te la pueden cambiar y disfrutar de una buena sombra muchos años. La última locura son los toldos solares que recogen todos esos rayos que tú no quieres y que generan energía para alimentar por ejemplo la iluminación de LED de tu terraza, balcón o incluso jardín. ¡Un dos por uno en toda regla, que además compensa!