Vestidor

Una familia joven y numerosa, nos encargó el proyecto de reforma integral de su vivienda con un objetivo muy claro, lograr un hogar acogedor con espacios amplios que pudieran compartir todos juntos.

Este piso de 190 m² estaba muy compartimentado en pequeñas estancias las cuales derribamos para obtener espacios más abiertos, eliminando pasillos y aprovechando al máximo cada centímetro.

Dos puntos claves fueron la apertura de grandes pasos en dos paredes de carga, de modo que el comedor y el salón quedaran comunicados; y la habitación de los niños se comunicara con el cuarto de juegos / estudio.

En el recibidor se ubicó el despacho en el que el matrimonio puede teletrabajar. Se diseñó una cristalera a modo de cerramiento para sectorizar el espacio sin restarle amplitud y luminosidad.

Tras el derribo de un antiguo patinejo de instalaciones en desuso, conseguimos una amplia cocina, con una espectacular isla. Este espacio está abierto al comedor principal y se comunica con el salón. Cuenta con una mesa para desayunos y con gran cantidad de armarios en los que almacenar todo lo necesario.

El dormitorio principal fue diseñado al milímetro, cumpliendo con las necesidades de los clientes que querían tener el vestidor y el baño en un mismo espacio, siendo un lugar cómodo y práctico para el día a día. Todos los armarios los diseñamos a medida cumpliendo con los requisitos de los propietarios.

La habitación de los niños es la joya de la corona, tras los derribos logramos crear un amplio dormitorio con zona de juegos y de estudio, además de todo el almacenamiento necesario para guardar las cosas de los tres pequeños de la casa.

Realizamos el proyecto de nuevas instalaciones cumpliendo la normativa y renovamos toda la iluminación con luces de bajo consumo.

Con el pavimento contino en prácticamente todos los espacios y un mismo color de pintura en las paredes unificamos todas las estancias. Exceptuando el lavabo de los niños y las zonas húmedas del baño principal en los que se utilizaron otros materiales como el porcelánico en distintos formatos. Con los papeles decorativos se consiguió dar un punto de sofisticación al aseo y al lavabo principal; y un toque divertido en la pared de las literas de los niños.

Los propietarios, muy implicados en todo el proceso, participaron activamente en cada una de las fases de la definición del proyecto y en las visitas de obra. Entre todos logramos alcanzar con las expectativas de los clientes y convertir esa antigua vivienda en un cálido hogar.