En un dormitorio se suelen instalar puertas correderas, especialmente cuando son pequeños. Pero también batientes o incluso plegables, si van más con vuestro estilo. Desde luego si lo que quieres es que tu ropa respire, lo ideal sería que tuvieran rejilla o algún otro sistema por el que pudiera entrar el aire. ¿Y debo pedir que los forren por dentro? preferentemente sí. Piensa que así evitamos muchos problemas de humedad y la ropa se mantiene dentro en mejores condiciones. La madera evitará malos olores y siendo de cedro, por ejemplo, dejará un dolorcito en el interior fantástico. Un armario cerrado, se integra mejor en un dormitorio, es más limpio y resulta más ordenado, aunque al ponerle puertas salga un poco más caro. Uno abierto facilita localizar la ropa, tiene más capacidad y es más económico, pero te obliga a ser muy ordenado y a dedicarle tiempo.