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drliving home
Os enseñamos un ejemplo perfecto de cómo reformar la cocina sin obras y cómo aprovechar el espacio y hacer que una cocina tan pequeña quede de revista.
- Solo con quitar parte del almacenaje superior, la cocina ya se hizo mucho más grande.
- Se cambiaron las anticuadas baldosas por una cocina pintada con una franja de azulejo blanca. Esta decisión fue todo una cierto. Se hizo alicatando sobre las antiguas sin quitarlas.
- Se puso, sobre el pavimento existente, un suelo vinílico de imitación mármol. Así se dio un acabado fresco y muy actual.
- Los detalles son los que marcan la diferencia: nos encantan los toques rústicos en los estantes de madera, la lámpara industrial o los tiradores de piel que hacen que los antiguos armarios parezcan otros.
- Un ejemplo perfecto de que con buen gusto y muy pocos recursos puedes transformar completamente tu espacio.