Para acabar con este importante, y no solo incómodo, problema estructural del hogar, lo mejor siempre es confiar en los verdaderos profesionales. Y es que serán estos expertos los que den con el tipo de humedad presente en dicha vivienda para acometer la solución precisa. Así, en el caso de estas humedades domésticas la mayor parte de ellas se producen por capilaridad (aguas del subsuelo que ascienden por los muros), filtración (las que vienen de debajo del terreno) y por efecto de la condensación.
En este último caso y si la afectación se debe a un excesivo nivel de vapor en el ambiente, lo más recomendable según estos profesionales es seguir una serie de consejos prácticos como airear bien las habitaciones y tener cuidado con la realización de tareas domésticas a diario como cocinar, ducharnos o incluso planchar. Acciones inofensivas pero que pueden traer consigo la aparición de ese excesivo vapor y dicha condensación de agua.
Recomendaciones que vendrán de la mano de las mejores soluciones dadas por los expertos como es el caso de tecnologías punteras capaces de ventilar y sanear amplias viviendas y así eliminar ese exceso de humedad; al tiempo que se ayuda a conservar la temperatura del hogar para una mayor eficiencia energética.