x
Visto en: Obra de Eva
Si tienes niños pequeños te habrá saltado ya la alerta: ¡esas esquinas! Uno de los contras de este tipo de mesas es que tienen unos cantos que pueden resultar peligrosos, sobre todo cuando hay peques en casa. Nada que no se solucione con unas cantoneras protectoras. El otro problema es que si un día se queda pequeña y no te queda más remedio que sentar a alguien en una de esas esquinas, tampoco le resultará muy gustosa la comida (aunque todo esté delicioso). Son pegas que a una mesa redonda nunca le podrás sacar.