Porque te ha costado tanto tomar la decisión, que ahora no puedes agobiarte por todo. Piensa que en una reforma siempre surgen imprevistos: un pilar de carga donde no te lo esperas, una pared de ladrillo detrás del pladur, unas bovedillas preciosas bajo el falso techo... No siempre un imprevisto es una mala noticia. Por eso, insistimos en la importancia de contar con un profesional que transforme el posible problema en solución y saque todo el jugo a tu casa, para que la disfrutes tú mismo, o entre con buen pie en el feroz mercado inmobiliario (¿querrás que sea la más atractiva del barrio para alquilarla rápido, no?). Pues eso, confía en los mejores profesionales y adelante. Cuando acabe la obra vas a estar tan agusto con todo limpito y " a estrenar", que lo pasado quedará en simple anécdota.
¿Y tu casa, necesita reformas? sigue los puntos clave que te hemos contado para que todo salga según lo esperado. Por cierto, del tema vecinos no hemos hablado. Además de tener todos los permisos en regla, nunca está de más que pases al presidente un "comunicado de obra". Las molestias es difícil que las puedas evitar, pero seguro esa sensación de "mal rollito vecinal", sí.