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Ese apego a la tierra antes mencionado también se traslada en el empleo de colores claros y materiales naturales; otra de las señas de identidad de todo baño con estilo escandinavo. Y es que esa combinación de madera con sencillos elementos cerámicos hace de un aseo todo un remanso de paz. Como tener el propio spa en casa.
Naturaleza en estado puro en forma de acabados más tenues, para dar con un aspecto más nítido, o bien otras opciones algo más oscuras y que recrean espacios con carácter y calidez. Incluso, si quieres un extra de elegancia, nada como la ubicación de grifos de color oro cepillado para conseguir reproducir fielmente ese ambiente natural.