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Visto en: JRKVC
Tan solo entrar a la vivienda, una mezcla de sensaciones se planta ante nosotros; una trabajada mezcla de materiales, se suma a la variedad de colores y a la loable combinación entre texturas, que hablan de cómo organizar un espacio sin necesidad de recurrir a las barreras. Pues el color nos marca la diferencia de usos, las texturas nos trasladan al pasado – robustos muros de ladrillos- y los materiales educan al ojo, haciendo que miremos hacia su merced. Así los planos que dibujan la madera de roble, con tablas colocadas en espiga del pavimento, junto con el entramado de vigas de madera en el techo, nos conducen hacia la luz del exterior, que entra y baña cada rincón de la casa.