Mirador a la ciudad

La primera vivienda, se centra en la idea de la vida tranquila y rural en el centro de madrid, una casa de 80 m² rodeada de terrazas, jardines y una maravillosa piscina ubicada en la planta 12 de un edificio, que hace olvidar los contratiempos de la gran ciudad. Una casa eficiente y funcional que guarda una gran sorpresa; tras subir unas escaleras de caracol llegamos a un mirador de planta ortogonal, que como si en el puente de mando de un barco estuviéramos, hace que surquemos los cielos de madrid.

lo mejor: la integración de casa y entorno, creando un oasis urbano que reúne, jardín vistas, piscina y muy buena vida.

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