El papel pintado, los zócalos de madera o las molduras son reformas rápidas y sencillas que causan un efecto instantáneo en cualquier estancia de tu casa. En el caso del papel pintado, te servirá para reforzar la fuerza de una o varias paredes del salón, incluso para separar ambientes en el caso de que sea un espacio multifuncional. Los nuevos acabados que imitan piedra, mármol, ladrillo de cara vista o incluso hormigón harán dudar al ojo de tus visitas. Siempre mejor los lavables para darles un repaso de agua y jabón cuando sea preciso.
Los zócalos de madera, además de decorar, aíslan y protegen las paredes de golpes o arañazos, fundamental cuando hay niños en casa. Y las molduras decorativas, que ayudan a bajar techos muy altos o dar un punto más “glam” a un salón, sin apenas esfuerzo. Aprende cómo decorar el salón.