Confiésalo, una de las mejores cosas de matarse a sudar en el gym era la ducha de chorrillos de después. Pero esto también se puede disfrutar en casa. ¿Y si te cargas una de las bañeras y en su lugar pones un plato de ducha? aprovecha la reforma para poner una ducha termostática empotrada, con un grifo que haga salir el agua a la temperatura perfecta. O si no quieres meterte en obras, deja la bañera, pero deshacerte de una vez de la cortina, y en su lugar pon una mampara (con tratamiento antical para no preocuparte de nada) e instala una columna de ducha con hidromasaje. Gimnasio y wellness sin salir de casa ¿qué más se puede pedir?
¿Y tú, estás practicando deporte en casa? ¿Qué te han parecido estas ideas? esperamos que os sirvan y motiven.