Un salón de planta abierta, conectado con la cocina gracias a la ausencia de muros, que se adapta a lo que necesitas en cada momento. ¿A qué esperas para tirar la pared del salón? fijándonos en el tema de la decoración, los sofás modulables tienen la gran ventaja de poderse mover cuándo y cómo te haga falta: enfrentados, en forma de L, o todos juntos para montar una gran cama de invitados. Su tapicería en colores luminosos es el detalle perfecto para conseguir un ambiente muy juvenil y desenfadado. Y hablando de temperatura, fíjate en el techo. Un ventilador es la solución perfecta para los que no queremos sufrir por la factura. No resecan el aire, ni provocan resfriados. Además se pueden tener encendidos de día y de noche. Si aún no lo tienes, pon uno en casa y verás cómo no será el único que instales. Hay modelos con y sin luz, que se pueden usar también en invierno (las aspas giran al revés) para ayudar a mantener la temperatura.